Tributo de Jorge Castro al Bicentenario en la explanada del Cabildo
Acompañado de una orquesta compuesta por 80 músicos de las orquestas Sinfónica Nacional (OSN) y Sinfónica de la Ciudad de Asunción (OSCA), el tenor Jorge Castro brindó tributo al Bicentenario de la Independencia del Paraguay, ante un nutrido público, con la Noche de Gala Mi patria soñada, que inició minutos después de las 21 y duró poco más de dos horas.
El escenario, apostado frente al antiguo edificio del Centro Cultural de la República El Cabildo –iluminado con los colores patrios-, cobijó a diversos otros artistas que compartieron escena con el tenor, así como un ballet compuesto por 30 bailarines y bailarinas del elenco de Sussy Sacco.
Castro llegó a la tarima central montado en un caballo blanco, escoltado por 52 jinetes de la Agrupación Montada de la Policía Nacional. Vestido con ropa de época, el cantante entonó a su llegada la canción Patria querida, ante el público que ondeaba con fuerza la bandera tricolor.
Al poco tiempo de saludar y subir al escenario, sonó la canción que Castro escribió especialmente para estas fiestas: La Independencia llegó. Luego recordó al músico Florentín Giménez a quien se refirió como “uno de los nuestros héroes nacionales, creó el Conservatorio Nacional de Música y la Orquesta Sinfónica Nacional”.
Inmediatamente cantó Así canta mi patria, del maestro Giménez, y siguió con la canción Cerro León. “Pido a la gente que se pare para saludar a Agustín Barboza, quien hoy está de cumpleaños”, dijo el tenor en referencia al extinto músico y compositor, antes de interpretar su obra Reservista Purahéi.
Tras la interpretación, llamó su esposa, la soprano Emilia Recalde, quien cantó Mujer Paraguaya y al culminar Castro dijo ante el público: “tengo una buenísima noticia para todo el Paraguay, ganó Cerro Porteño”, y el público vibró.
Pura fiesta
El Ballet de Sussy Sacco intervino en varias canciones con coreografías y vestuarios resplandecientes. El presentador Rubén Rodríguez anunció a varios artistas más, quienes interpretaron con Castro obras del repertorio popular paraguayo.
Qué linda es mi bandera, Bravo Paraguay (con el Coro de niños del Bicentenario), Galopera, Che trompo arasa, Paraguaya linda (momento en que una bailarina danzó con 11 botellas en la cabeza), Chokokue kéra yvoty, Chokokue purahéi, Mi patria soñada y otras canciones fueron escuchadas y acompañadas por palmas y vítores del público asistente.
La Dinastía Simón, grupo integrado por López Simón y sus hijos Alejandro y Pablo, interpretó junto a Castro Tetagua Sapukái, y luego volvió Emilia para cantar con su marido Ñemity y Chirikoe.
Los músicos Cantalicio Argüello, Julio Sosa y el arpista Marcelo Rojas subieron para el último tramo del concierto, al mismo tiempo del popular Quemil Yambay, y juntos cantaron Trece Tuyutí y Che la reina, con una coreografía especial del Ballet.
El final fue coronado con la interpretación de Patria querida en todas las voces que compartieron escenario con el tenor, envueltos en una gigantesca bandera paraguaya, y con el grito de Viva el Paraguay, bajo el cielo iluminado con fuegos de artificio y la repetición de la canción La Independencia llegó.
